Secrets of Raetikon para Windows

El bosque de los misterios

Secrets of Rætikon (también Secrets of Raetikon) es un pequeño juego indie de exquisito diseño artístico y agradable jugabilidad. Es un juego que busca el misterio y la curiosidad del jugador, que gira principalmente alrededor de la exploración y el descubrimiento. Aquí la sorpresa lo es todo. Si además, a eso le sumas un control perfecto y una música que te mete aún más en ese extraño universo, entonces el resultado es maravilloso.

Curiosidad mágica

En este juego controlarás un hombre-pájaro que se mueve por un extraño bosque lleno de animales y monumentos mágicos. A excepción de un breve tutorial inicial que te explica cómo moverte, coger las cosas y lo que tienes que hacer (de una manera muy difusa), el juego no te explica nada más. El resto lo debes descubrir por tu cuenta, volando por el bosque, enfrentándote a los súbitos peligros y solucionando puzles de escenario, no especialmente difíciles pero sí bien encajados.

Tu personaje no tiene armas, sólo la velocidad de vuelo y un grito que te servirá para despistar a los enemigos. Ahí radica parte del encanto de Rætikon, esa sensación de indefensión, de aprovechar el medio y no la fuerza para enfrentarte a los peligros.

Mientras viajas por el bosque encuentras muchos misterios. Monumentos mágicos que debes activar, piezas triangulares que tienes que recoger para activar mecanismos, piedras inscritas con un extraño lenguaje esperando ser traducido. Secrets of Rætikon es un juego de viajar por el bosque, abrir nuevos caminos y avanzar, mientras disfrutas volando con tu hombre-pájaro. Es algo tan sencillo como eso.

Y aunque parezca sencillo, no es fácil entretener al jugador de este modo. Secrets of Rætikon lo hace, cada escena tiene algo sorprendente, cada zona del bosque aporta algo nuevo que pica la curiosidad. ¿Qué es esa estatua? ¿A dónde va ese camino oculto? ¿Para qué sirve este mecanismo?

En última instancia, el objetivo es recoger unas piezas brillantes que debes devolver a un altar gigantesco. Esas piezas cada vez están más ocultas y serán cada vez más difíciles de encontrar, un poco al estilo del juego FEZ. Y lo mejor/peor de todo, una vez las encuentras debes regresar, luchando contra el resto de animales del bosque que intentan arrebatártela.

Excelente sensación de volar

Quizá algo realmente destacable es el control del hombre-pájaro. Es fantástico, da la sensación de volar y volar y volar… nunca te cansas de moverte. Especialmente útil es tener un gamepad con sticks analógicos, para afinar mejor el movimiento.

Al margen del placer que produce volar, Secrets of Rætikon no tiene muchos secretos en cuanto al control. Hay un botón que sirve para agarrar objetos, que luego puedes lanzar si son pequeños, o mover si son muy grandes. Algunas cosas se rompen y te dan energía para sobrevivir más tiempo.

La idea del juego es interactuar, tocar objetos y monumentos y ver qué se activa o cómo el juego te deja avanzar.

El diseño lo es todo

Secrets of Rætikon es puro diseño artístico. Todo está cuidado con mucho mimo, los personajes y los fondos son fantásticos. Parecen recortes de papel, coloridos y simples que, una vez unidos, crean formas complejas.

El universo del juego es muy grande, mucho más de lo que parece a primera vista, y los caminos se van desbloqueando por zonas inesperadas. También hay caminos ocultos que debes descubrir.

La música es muy acertada, con un toque mágico y misterioso que encaja como un guante con lo que ves en pantalla. No siempre está activa y hay momentos para el silencio o el ruido del bosque por el que vas volando.

Conclusión

Quizá Secrets of Rætikon se haga algo corto con sus cuatro horas de duración, pero si lo que te gusta es explorar y ser sorprendido entonces disfrutarás esas cuatro horas de principio a fin. De cara al final se puede hacer algo difícil pero siempre es divertido y nunca frustrante. Este juego es, además, un buen ejemplo de cómo el diseño y la jugabilidad pueden ir de la mano y potenciar aún más un producto que ya nace con calidad.